Saber qué decir para transmitir autoridad en cada momento es jodido.
Tanto que la mayoría la caga constantemente pensando que hacen lo adecuado.
Pero hoy te cuento un truco de comunicación que te puede facilitar mucho las cosas: fijarte en los psicoterapeutas.
Los psicoterapeutas (al menos los muy buenos) tienen una postura que usan en sus sesiones.
No una postura metafórica, digo al sentarse.
Se sientan de una manera determinada.
Usar ESA postura y no otra cuando dan instrucciones es lo que hace que los pacientes las acepten.
¿Y sabes qué tiene que transmitir esa postura?
Si piensas que es cercanía, te equivocas por mucho.
Y si has dicho simpatía o comprensión, pues tampoco es eso.
Si transmite algo así, se termina su autoridad y el paciente no aceptará nada de lo que le diga.
Lo que tiene que transmitir es inteligencia.
Inteligencia.
Nada más.
Dar la seguridad de que lo que dice es lo mejor y más adecuado para su paciente.
Porque si el paciente no percibe que su terapeuta es más listo que él cuando le dice qué hacer, no lo escucha.
Si no lo escucha, no hace el trabajo.
Y si no hace el trabajo, la terapia no funciona.
Pues eso, que tu comunicación, tu forma de escribir, de hablar, de responder… no tiene que sonar bonita ni amable.
Tiene que sonar más lista.
Tiene que proyectar que sabes algo que ellos no.
Porque si no, ¿crees que cuando alguien vea tu web, tu presupuesto o tu forma de responder por WhatsApp… percibirá eso?
¿O nota que usas las mismas palabras que todos los demás con los que ha hablado?
¿No te interesa que te diferencien de ellos?
Que piensen que eres más inteligente, digo.
Porque eso es lo que hace que pierdas trabajos.
La sensación que das.
Punto.
¿Entonces necesitas ser terapeuta para saber cómo hacerlo?
Pues podría ser, pero te iba a costar unos cuantos años.
Lo que yo te aporto es enseñarte cómo funciona la comunicación (la de verdad) que hace que sea el cliente el que vaya detrás de ti y no al revés.
Cómo aplicarla en tu negocio para que el cliente te vea y diga “joder, es mejor que el resto”.
¿Es algo que te interesa?
Lo explico cada día en un correo que lees en 3 minutos.